"Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y, sin embargo, vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?" Mateo 6:26
Es cierto, Dios le da comida a todas las aves... pero no se la tira en el pico.
Un pájaro del campo se levanta temprano, se baña, sale a ganar su comida. Tiene que hacer el nido, buscando los materiales.
Convence a la pajarita para hacer pareja, y a poner el huevo!
Lo empollan, más trabajo alimentando pajaritos, les enseñan a volar.
Si el viento bota el nido, va de nuevo, lo rehacen. Se cuidan de los depredadores.
Cuando los polluelos vuelan solos…saben soltarlos, y dejarlos ir.
Y sin embargo, todos los días descansan y hasta el rato sacan para cantar.
Queremos el pan de cada día, entonces…
¡A trabajar, carajo!
Publicado.
La Nación, 23 de octubre 2007.
http://www.nacion.com/ln_ee/2007/octubre/23/opinion1287658.html
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