Elemental, mi querido Watson.

El famoso Dr. Watson visitó Costa Rica; daría una exposición en la mayor casa de enseñanza superior, la Universidad de Costa Rica (UCR), pero algo salió trágicamente mal. Me refiero al Dr. James Watson, co-descubridor de la estructura molecular del ADN, ganador de un premio Nobel por tan revolucionaria hazaña y a quien se considera el padre de la fisiología moderna. Su obra da evidencia de que el método científico puede transformar la biología, la medicina y hasta el derecho, impactando casi todos los campos del saber.

Hasta aquí me siento orgulloso de que la charla no se dio en el food court de una U-Livianita, sino en la Ciudad de la Investigación de mi querida alma máter, y que sería transmitida en vivo vía internet, otro logro de la ciencia, pero a último minuto todo se desplomó. El auditorio entero atestiguó un crimen contra la libertad de expresión. El Sr. Cortés, director del Consejo Universitario, emitió un comunicado (muy descortés) en que se oponían a que hablara el Dr. Watson porque ha expresado pensamientos contrarios a la diversidad sexual. La charla tenía por título “El descubrimiento de la doble hélice en retrospectiva” no “El ADN gay”, pero para prevenir, se ordenó a los técnicos de la UCR cortar la conexión de internet que permitiría la difusión del pensamiento científico. Tras mucha presión de los asistentes que colmaban el recinto, nuestro amigo Watson pudo exponer. ¿Cuáles son los móviles que tendrían los ofensores para darle un manazo en la boca a un visitante de tal calibre, y aplicar censura previa a la prensa?

Google, nuestro Sherlock Holmes moderno, encuentra las pistas para resolver el caso: 1- El diputado Villalta del Frente Amplio (FA) envió una carta a la rectora de la UCR y al Consejo Universitario pidiendo que se suspendiera conferencia de Watson porque “ha realizado declaraciones racistas”. 2- Las autoridades de la UCR ya han actuado de la mano con los sindicatos, partidos de izquierda y federaciones estudiantiles aunque cometan actos vandálicos o limiten libertad de tránsito. 3- El vicerrector de Investigación que trajo al Dr. Watson podría querer ser rector, y tan magna visita le daría buena imagen. 4- Los gobiernos de Cuba, China y Venezuela que tanto admira el FA también han cortado preventivamente de los medios a quienes piensan diferente o podrían ganarles las elecciones. 5-La rectora aseguro que la UCR es tan autónoma y libre, que es casi extraterritorial, es como otro país gobernado por otras leyes.

Nuestra Cancillería debería enviarle nota de disculpas al Dr. Watson, porque este país respeta la libertad de expresión y lo ocurrido es una vergüenza nacional. Para un científico como él, sería fácil entender la conclusión, que es elemental: La UCR tiene un problema genético que le provoca terribles mutaciones. Evoluciona de cuna de la ciencia a nido de politiqueros, desarrolla censura previa que inhibe su libertad de cátedra, su principal nutriente ya no es la ciencia, sino la ideología; la membrana celular conocida como autonomía que no deja entrar a la policía, sí es permeable a políticos radicales. El método científico confirma que la mutación es incurable, la Academia está enferma de muerte.

Ing. César Monge. cesarmonge@yahoo.com www.cesarmonge.com